martes, 25 de marzo de 2008

DE ENFERMER@S Y ENFERM@S

Hablar de temas de salud, me resulta fácil, muy fácil, desde niña me he visto rodeada de médicos, pruebas, algunas incluso demasiado traumáticas para una cría, cosas como las “electro miografías”, que para quien no las conozca son unas pruebas en las que te pinchan un montón de agujas en tus músculos y te hacen forzarlos para medir su fuerza, luego te dan descargas eléctricas para controlar la forman en que reaccionan, una gozada!!, la última me la hicieron embarazada de mi niña mayor y hasta a la neuróloga le dolía de pensarlo!, lo cierto es que todas estas vivencias fueron lo que me empujaron a estudiar algo de la rama sanitaria, mi sueño era ser médico, pero difícilmente mis padres podían hacerse cargo de una carrera fuera de casa, así que opte por la enfermería, y ¡sorpresa!, me encantó, cada día me gusta más, y sobre todo me llena como persona.
Pero ¿Qué es realmente ser enfermer@?.
L@s enfermer@s, somos un@s individuos intermedios, algo que sin querer es motor en sanidad pero que difícilmente es reconocido como tal, a caballo entre los altos escalafones y los subordinados, somos un poco médicos en ocasiones, un poco psicólogos, un poco madres, un poco padres, hermanos, familiares, auxiliares, celadores, colegas, sacerdotes,… Un poco de todo, y un poco nada reconocid@s.
Hemos dejado atrás el ser meros instrumentos de los médicos, que solo debían cumplir ordenes, para pasar a ser el centro del equipo, organizamos el trabajo, hacemos tareas de docencia, educación sanitaria, vigilamos los síntomas del paciente, intentando detectar el mínimo cambio y en ocasiones incluso debemos ir un poco más allá, tratando de estabilizar situaciones difíciles mientras el médico no está.
Cuando todo va bien, parecemos prescindibles, pero cuando algo va mal todo el peso recae sobre nosotros, teniendo que campear generalmente, con un paciente en situación limite, familiares agobiados que no entienden y solo quieren soluciones, y compañeros auxiliares que buscan en nosotros la tranquilidad mientras el médico no llega, en esos momentos somos todo, y actuamos de forma intuitiva y eficiente.
Las cosas no siempre van bien, y entonces sientes que la vida es injusta, o que quizás podrías haber hecho mas, pero es la vida, y tu has actuado lo mejor que has podido.
Ser enfermer@ divide tu vida en dos mundos totalmente distintos, el personal, y el laboral, ambos únicos y distintos, pero que por desgracia van unidos, por un extraño vinculo, desconectar es muy, pero que muy difícil, conseguir que tu entorno personal entienda complicado, al final acabas pactando que lo mejor es no mezclarlos, aunque claro siempre alguien pregunta, o te cuenta, a mi no me suele importar, pero a veces estoy cansada.
Una de las cosas que siempre me ha hecho gracia, es que la mayoría de las parejas, familias y amig@s de un@ enfermer@, se quejan de lo mismo, siempre eres la última, me han dicho muchas veces, y es que fichar en punto es prácticamente imposible, siempre hay cosas de que hablar, siempre pautas que plantear, siempre casos que preocupan y necesitan más cuidados, siempre…..
En pocas palabras la enfermería es sacrificio, comprensión, intuición, vocación y dolor, mucho dolor pero a la vez gratificación, porque una sonrisa, de alguien a quien cuidas vale más que todo el dinero del mundo.
Así en sanidad, l@s enfermer@s somos las grandes olvidadas pero sin nuestro trabajo algo fallaría, siempre debemos estar alerta, siempre pendientes del mínimo cambio, y eso al final se paga, el stress laboral es uno de los grandes males de nuestra
profesión.

Al otro lado están los enfermos, los grandes sufridores, cualquiera de nosotros, puede estar al otro lado, sonrio al recordar una frase escuchada de algún paciente, de esos que me quieren, la mayoría he de decir, “las enfermeras y los médicos no debían enfermar”, jeje, imposible, pero parece un poco absurdo que quien cuide deba ser cuidado, pero la realidad es que si enfermamos, es que si necesitamos cuidados y es en ese momento cuando reconoces el valor real de tu trabajo, porque ser enfermo es una de las cosas más traumáticas de nuestra vida.
En la actualidad hay muchas enfermedades consideradas crónicas, algunas de origen genético como en mi caso (Distrofias musculares,) otras denominadas autoinmunes (Lupus,…..), otras reumáticas (artritis reumatoide…), otras de origen infecciosos (Sida, Hepatitis…), otras degenerativas (Esclaserosis….), otras ambientales (Epoc,…), mentales (esquizofrenia….) otras más conocidas como la diabetes, o como no los tumores, ect.
Los avances de la medicina, hacen que la mayoría de los enfermos crónicos podamos tener una vida más o menos normal, con una calidad muy pero que muy aceptable, pero tener una enfermedad crónica te lleva a ver la vida de otra forma, con otra perspectiva, como si te hubiesen puesto limite, como si el futuro ya de si incierto, para ti fuera más incierto, así que o haces que tu vida se adapte a la nueva situación y la disfrutas o te hundes y tu vida entra en una especie de barrena emocional en la que ya nada importa, esto amigos es un error, hay que luchar, vivir el día a día y encontrar el equilibrio entre tu vida y tu enfermedad, aquí entramos nosotras dispuestas a ayudar al enfermo a encontrar ese equilibrio, enseñando autocuidados, animando en los tratamientos, e intentando que sean más las ganas de vivir a la desesperación.
Este es el fin de este post, haceros entender, que siempre hay una enfermera dispuesta a escuchar a un enfermo, y siempre hay un enfermo dispuesto a sonreír a una enfermera, este es el mensaje, tener una enfermedad crónica no supone que nuestra vida se para sino que hay que cambiar el chip y seguir adelante, cuidarse de forma especial si, pero sin renunciar a vivir, porque entonces si no hay ilusión por vivir, nuestro trabajo no tendría sentido.
Así son las cosas, si no hubiera enfermos, no habría enfermeras, y si no hubiera enfermeras que pasaría con los enfermos, nuestras vidas van unidas, unos sin otros no tendrían las mismas oportunidades, ni de ayudar, ni de curarse. Este es el prologo a una serie de post, que iré preparando y colgando, hablando como en mi post sobre el SIDA , sobre las distintas enfermedades, y sus síntomas, tratamientos y consejos para cuidarse, como siempre estaré gustosa pendiente de vuestras preguntas e iré completando los post, con nuevas informaciones, y respondiendo a vuestras dudas.
Espero que esto os sirva de ayuda, y por supuesto estaré encantada de hablar de los temas que deseéis.

Y para animaros y como lema queda chulo "sin ti", porque sin ti mi enfermo ¿que sería yo? y sin ti mi enfermer@ ¿que sería de mi?, os dejo una canción de Donato y Stefano, para mover el esqueleto que la vida hay que vivirla!!

--------DONATO Y STEFANO--------SIN TI-----------------------



Un bico a todos de esta enfermerita.

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